iglesia de San Pedro Apostol

Tesoro arquitectónico, cuya construcción inició el año 1716 bajo la dirección del Licenciado Diego Arias de la Cerda, Cura de la Doctrina de la Villa de Urubamba, continuando con esta importante obra el Cura Cesar de Mollinedo, sobrino del Obispo del Cusco Dr. Manuel Mollinedo y Angulo; concluyéndose después de 14 años con la decidida cooperación del Prelado Diocesano Don Martin Rado y Ampuero.
Iglesia que destaca por su majestuoso atrio construido totalmente de piedra labrada, cuyo frontis ocupa el lado norte de la plaza de Armas.

 En el interior de este templo, al fondo y en la parte alta se aprecia en la nave central, como expresión de arte y de esplendor, el retablo del Altar Mayor de estuco con un dorado laminado.

Aquí, en la pared superior central se encuentra la imponente imagen de San Pedro Apostol, patrón de la provincia.
 Al lado derecho de esta nave se pueden apreciar varios lienzos de gran tamaño, trabajados por renombrados pintores de la Escuela Pictorica Cusqueña.


Otra reliquia que se conserva también en esta Iglesia, es el Altar de la Virgen de Rosario, obra de gran jerarquía que pudo ser trabajada por los maestros ensambladores don Isidro Alfaro y Diego Sánchez, artistas que intervinieron en los trabajos de la iglesia de Santa Ana en la ciudad del cusco.